Ayer en nuestro instituto celebramos el día contra la violencia de género y me di cuenta de varias cosas. Podemos destacar entre ellas que hoy en día son muchas las mujeres que por desgracia siguen sufriendo estos ataques o abusos por parte de muchos hombres que pagan su frustración que tienen con la vida, en su trabajo o sus amigos con su mujer o pareja sentimental, las cuales son las "muñecas o marionetas" de estos "hombres" que las pobres ya bastante tienen con sus vidas como para también tener que solucionarles la vida a otros.
Pero a lo que me quiero ceñir es a un aspecto que me di cuenta después de darle vueltas y vueltas a esta gran injusticia. ¿Nadie se ha dado cuenta que cuando maltratas a una mujer, le estas haciendo el mismo daño a tu hijo? Cuando una mujer sufre este maltrato, su hijo esta presente mientras que ella lo esta sufriendo y esto acabará con unos daños psicológicos tremendos para el. Mediante que el niño va creciendo, ese problema se irá incrementando y afectándole tanto en su vida privada como en su vida social. Seguro que a esos hombres no les hubiese gustado que su padre le pegara a su madre.
Por ello acabo esta entrada con una reflexión: Que las únicas patadas que reciba la mujer, sea las que les de su hijo en el vientre!.
REFLEXIONEN
Pues si, de hecho los menores tienden a repetir los comportamientos que ven en sus padres, aparece de nuevo el querido Bandura... Haber recibido malos tratos o haberlos vivido en el hogar es un hecho que aumenta las posibilidades que un niño agreda de adulto a una mujer, o que una niña vea normal ser agredida cuando sea mujer.
ResponderEliminarHay que cambiar esas malas actitudes y valores sociales que tanto daño hacen a la mujer y a todo su entorno familiar siendo los niños/as las víctimas más directas de ese maltrato. Pienso que con la educación podemos cambiar y orientar la manera de ver las cosas, asumirlas y afrontarlas para que el futuro sea mejor.
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